viernes, 26 de octubre de 2012

Arquitectura al día. Torres y rascacielos. De Babel a Dubai.

Caixaforum. Paseo del Prado 36. Madrid

Del 10 de Octubre de 2012 al 5 de Enero de 2013.


Comentaba Ignacio Paricio en el artículo que publicó en el número 6 de la revista Arquitectura Viva allá por el año 1.989, que construir un rascacielos era el sueño confesado de los mejores arquitectos, y la rúbrica definitiva de una gran carrera profesional, sobre todo si dicho sueño se materializaba en Manhattan.
Cierto es que en ese momento nadie sospechaba que la isla que en el siglo XVII compraron los holandeses a los incautos indígenas a cambio de objetos valorados en sesenta guilders dejaría de ser, unos años más tarde el único y monopolista perfil de una ciudad erizada de “skycrapers”.

Salvo en el caso de las torres, entendidas estas como edificios en altura, la presencia de estos edificios en las ciudades está íntimamente ligada al afán por exhibir un notorio “status”, en el mayor de los casos financiero. En aquellas ocasiones, en las que los rascacielos han asumido el programa residencial privado con el sustento teórico de la liberación de superficie y con ánimo de evitar un exceso de ocupación en planta en beneficio del espacio público y la vegetación, se han quedado en proyecto, o en el mejor de los casos en edificios hoteleros.

La globalización y el movimiento de capitales, han trasladado la efervescencia mercantil a los denominados países emergentes, y allí, con el sustancioso abono de petrodólares y fuertes monedas asiáticas, han brotado de nuevo los juncos de vidrio, metal y paneles, manifestando con su potente presencia iconográfica, el sitio donde se aposenta en la actualidad el símbolo de la economía de mercado.


Desde el origen de los edificios en altura, representados por la torre babilónica en la exposición, hasta los citados rascacielos, en los que los condicionantes del viento, sismo y seguridad acompañan a la rentabilidad de la propuesta en otros aspectos, a lo largo de la historia han ido apareciendo, de la mano de grandes arquitectos, soberbios edificios en altura.
De las soluciones de planta resueltas por estos maestros, centralizando comunicaciones y servicios, liberando así el perímetro a favor de la iluminación natural, pasando por la evolución del grosor, peso y función de los cerramientos, hasta la estratificación por sectores de plantas y optimización de las instalaciones, estas construcciones han establecido los principios y fundamentos para el diseño de los actuales rascacielos.

José Miguel Alonso Álvarez.
Arquitecto.


miércoles, 24 de octubre de 2012

Pizarra Arqsite. Nuevos dibujos.

¡¡NUEVOS DIBUJOS DE JOSÉ MIGUEL ALONSO EN ARQSITE!!




lunes, 15 de octubre de 2012

Arquitectura al día. Concurso No.15: Re-Habitar el s. XXI: La Vivienda Social desde el Paradigma Moderno.


Cuando pienso en Vivienda Social la asocio e integro dentro de grupos de vivienda colectiva donde las unidades se agrupan siguiendo un criterio geométrico de aprovechamiento máximo, distribuciones  que subdividen áreas muy ajustadas de dimensiones según ordenanzas rígidas y sin actualizar,  criterios de salubridad sujetos a una  legislación obsoleta, materiales humildes tratados inadecuadamente, donde las superficies útiles priman sobre cualquier otro concepto…etc. Hablo de Economía y Política.

Las formas de vida han cambiado, las unidades familiares también, así como las costumbres sociales, los principios éticos y morales. Toda una revolución donde el espacio doméstico antes femenino está, actualmente, ocupado por ambos sexos. En este caso atiendo a lo público y lo privado, al espacio servidor y al espacio servido…etc.

Entiendo que hay unas dependencias ligadas a la piel de un edificio y otras en menor medida, aunque no lo entiendo con la misma definición que en años precedentes. Esta piel ahora es diferente. Es más gruesa; se divide en diversas capas que además de responder a las necesidades de ventilación, aislamiento  e iluminación, se mueve, almacena como por ejemplo objetos, energía…etc. Es diferente el concepto del hueco, sus dimensiones, la forma y los materiales. Hay membranas permeables que transpiran sin necesidad de abrir y cerrar, que aíslan y mantienen un grado de confort adecuado, y permiten que penetre la luz cuando falta y evitan su paso cuando sobra. Aquí hay que revisar los sistemas constructivos y adecuarlos a la industria, es decir, a la producción.

Los espacios verdes, de ocio y recreo  ya no son superficies solo derivadas de la edificabilidad es decir espacios residuales que ocupan los vacíos dejados por la edificación. Son superficies horizontales y verticales en los llenos, dentro de ellos, alrededor de ellos, en el suelo, en el medio, en las cubiertas. En este sentido hemos visto algún ejemplo en los últimos años de las  promociones públicas.

Los electrodomésticos y el equipamiento forman parte del todo. Simplifican las diferentes funciones de las estancias y reducen sus dimensiones. Esto implica una readecuación de la normativa que dimensiona y define el concepto de vivienda mínima. No hay que reducir, me parece que hay que encontrar nuevas soluciones. La Domótica es un apartado muy importante de este capítulo que de momento ha introducido otro concepto en la seguridad y defensa.

Y por último hay que contemplar el concepto de Sostenibilidad. La vivienda social ha de ser fundamentalmente sostenible. Está dirigida a capas de población de poco poder adquisitivo. No son un gran negocio para la administración. Tienen que ser estas viviendas sostenibles a lo largo del tiempo, y con un aprovechamiento máximo de las fuentes de energía.

Se abre una gran oportunidad de debate y el estudio de todas y cada una de las partes que componen la vivienda social. Hay puntos a discutir comunes a todas las viviendas y singulares ligadas entre otras cosas a los costes de Producción, tipo de Población, política del suelo y Urbanismo.

LINK de las Bases:  http://www.arquine.com/concurso

G.A.B.

lunes, 1 de octubre de 2012

Noticias Arqsite. Becas para Artistas UNESCO-Aschberg 2013.

Las Becas para Artistas UNESCO-Aschberg favorecen la movilidad de jóvenes artistas con el fin de enriquecer sus proyectos creativos permitiéndoles así establecer un diálogo en la diversidad cultural. El Programa ofrece residencias a jóvenes artistas (entre 25 y 35 años) alrededor del mundo.